El evento forma parte de la nueva iniciativa “Moviéndonos Juntos: Promoción de la Movilidad y la Salud Mental en el Adulto Mayor”, desarrollado por la Escuela de Enfermería del Recinto de Ciencias Médicas de la UPR
Una veintena de estudiantes de la Escuela de Enfermería del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico dirigieron a los adultos mayores que atiende el Centro Coameño para la Vejez en una serie de ejercicios y actividades, que van de la movilidad a la reflexión, como parte de una nueva iniciativa de bienestar integral dirigida a promover su movilidad e independencia.
Una pancarta, donde cerca de 40 de los participantes escribieron sus motivos para dar gracias, consignó el provecho que derivaron de su participación en el programa “Moviéndonos Juntos: Promoción de la Movilidad y la Salud Mental en el Adulto Mayor,” desarrollado en el curso ENFE 4185: Cuidado de Enfermería de la Persona de Edad Avanzada, de la profesora Elba Ortiz Padilla, de la Escuela de Enfermería.
“Como líderes en formación, los estudiantes de cuarto año tuvieron la oportunidad de integrar los conocimientos adquiridos en un contexto práctico, destacando la empatía y el cuidado holístico que son distintivos de nuestra escuela, y nuestro compromiso con el desarrollo de profesionales capaces de transformar vidas,” manifestó la decana interina de la Escuela de Enfermería, doctora Milagros I. Figueroa.
“La actividad fue un éxito,” dijo, por su parte, la profesora Ortiz Padilla, quien dirigió el evento. “Todos los adultos mayores se involucraron, incluyendo los que usan andadores. Nosotros promovemos que se mantengan en ese grado de independencia y aspiramos a que repitan los ejercicios aprendidos en sus hogares.”
El grupo, integrado por 16 estudiantes de enfermería de cuarto año, expuso a los adultos a experiencias dinámicas basadas en el modelo de geriatría que trabaja Mente, Movilidad, Medicamentos, Multicomplejidad y lo que Más importa (5Ms). Entre estas, decoraron marcos de madera que ellos mismos prepararon, donde describieron sus cualidades como personas. También participaron en actividades físicas e interactivas que fomentan la movilidad, estimulan la salud mental y en ejercicios dirigidos a reflexionar sobre sus prioridades y valores personales.
Estas actividades promueven en el adulto mayor la movilidad segura, el equilibrio y la fuerza muscular, mientras que los juegos mentales y técnicas de relajación les enseñan a fortalecer la memoria, la concentración y el bienestar emocional.
“Esperamos que al finalizar la actividad, los participantes hayan experimentado mejoras en su movilidad, un mayor sentido de propósito y una visión más positiva de su salud mental y física. Nos complace haber provisto a los estudiantes la oportunidad de aplicar conocimientos teóricos en un contexto práctico, fortaleciendo su empatía y habilidades de cuidado centrado en la persona adulta mayor,” dijo la profesora Ortiz Padilla.
