Destaca las grandes aportaciones de la UPR al país, las medidas adoptadas ante la crisis fiscal y hace un llamado urgente a proteger la Universidad
30 de marzo de 2022
San Juan – “En el momento histórico que está atravesando la Isla, es trascendental que los recursos económicos que invierte el gobierno central estén destinados a satisfacer los servicios esenciales de la población y al fortalecimiento de las iniciativas que permitan la recuperación económica y social del País. La inversión en la Universidad de Puerto Rico (UPR) ha demostrado históricamente cumplir con ambos objetivos”. Con estas palabras la presidenta interina de la UPR, doctora Mayra Olavarría Cruz, inició la defensa del presupuesto de la institución en la vista pública conjunta celebrada hoy en la Cámara de Representantes.
La doctora Olavarría Cruz defendió la asignación anunciada de $621 millones para el Año Fiscal 2022-2023 provenientes del presupuesto general, varias resoluciones conjuntas y ayudas a los estudiantes para el pago de matrícula. Su defensa se basó en un resumen de las grandes aportaciones de la UPR al País. De igual modo, condenó los recortes a los que se ha sometido la universidad en los pasados años.
“El Recinto de Ciencias Médicas tiene un programa para médico indigentes que ofrece atención especializada a más de 27,000 pacientes participantes del plan de salud gubernamental anualmente. En los últimos años, este programa ha sufrido recortes significativos y aunque se visualiza un aumento en la aportación gubernamental al mismo, no es suficiente para parear el costo que representa para la Universidad”, reveló.
“Nuestro Recinto de Mayagüez es responsable por la Red Sísmica de Puerto Rico y la Red de Movimiento Fuerte que durante 24 horas al día los 365 días del año monitorea los movimientos sísmicos que pueden afectar a la Isla y al Caribe. En los eventos telúricos sufridos hace dos años, su papel fue vital para evitar una catástrofe mayor al mantener informada a la población durante el periodo sísmico”, añadió.
Olavarría Cruz también destacó la importancia del Recinto de Río Piedras de la UPR. “El Recinto de Río Piedras es el depositario de la mayor colección de libros de derecho y literatura del Caribe y el mayor museo antropológico del País, asegurando la conservación de la memoria histórica de nuestro pueblo. Además, ofrece servicios profesionales gratuitos a través de clínicas y prácticas en agencias del gobierno, ofrecido por las escuelas profesionales como Derecho, Educación, Sicología y Trabajo Social, entre otros; garantizando la protección de los derechos y el bienestar social de un amplio sector poblacional en condiciones vulnerables como mujeres maltratadas, madres solteras, afectados por los desastres naturales y víctimas de violencia de género. Dichos proyectos se podrían ver afectados por la falta de fondos para contratar una facultad capacitada que supervise la labor del estudiantado”, indicó.
La presidenta interina también destacó las medidas que ha tomado la UPR en los pasados años para atender la crisis fiscal y para levantar sus propios recursos. “En cuando al retorno económico que la Universidad genera al País, los estudios demuestran que por cada dólar que aporta el gobierno central a la UPR se genera un retorno de $1.5 y por cada 100 empleos generados como parte de las actividades de la institución, se crean 164 empleos adicionales en otras áreas de la economía, por ejemplo, negocios de comida, hospedaje y colmados que son pequeños negocios que se nutren de la operación de las unidades”, explicó.
Tras asegurar que, aunque la UPR ha demostrado ser la mejor inversión en el País por los servicios que ofrece y el retorno a la economía, ha sido la agencia del gobierno que más recortes ha enfrentado con una reducción en 5 años de un 52% de las apropiaciones que recibía del gobierno central. “Ante esta realidad, la Universidad ha sido proactiva en generar ingresos externos y en realizar las transformaciones institucionales necesarias para continuar brindando un servicio de calidad”, aseveró.
Como ejemplo de las medidas adoptadas mencionó un aumento sin precedente en la captación de fondos externos de investigación logrando un 37% de aprobación de propuestas sometidas; la creación de más de 1,500 cursos en línea y casi la totalidad de la oferta presencial (97%) ha sido adaptada a modalidades de enseñanza remota; los recintos de Arecibo, Aguadilla y Utuado comenzaron un Plan Piloto Modelo de Servicios Compartidos para maximizar los recursos no docentes en distintas oficinas administrativas y la centralización de las Oficinas de Finanzas y Recursos Humanos para evitar la redundancia de forma que se optimicen los servicios administrativos correspondientes, entre otros esfuerzos.
Antes de concluir su ponencia, la doctora Olavarría Cruz llamó la atención de como los recortes impuestos por los planes fiscales aprobados en los pasados años han puesto en riesgo la estabilidad del Sistema UPR.
“A pesar de las medidas mencionadas y otras adoptadas, los recortes presupuestarios han arrastrado a la Universidad a una situación fiscal precaria que ha redundado en un aumento del costo de estudio y afectado las condiciones laborales de los trabajadores de la Institución; esto a mediano plazo pudiera afectar las acreditaciones de Recintos y programas y la pérdida definitiva de los fondos externos”, alertó.
La presidenta interina de la UPR concluyó su ponencia con un llamado a los legisladores a proteger la UPR. “El País necesita una Universidad fuerte para salir de la crisis fiscal que estamos enfrentando. Alineados con las políticas públicas del gobierno, la universidad del estado ha estado activa reestructurando sus ofrecimientos académicos y sus procesos administrativos para mantener los servicios a las poblaciones cada vez más marginadas social y económicamente y crear áreas del saber que sirvan para el desarrollo del País. Solicitamos que, así como legisladores del siglo XX se aseguraron de que Puerto Rico tuviera su Universidad, nuestros legisladores, hoy, se aseguren de que nuestro pueblo siga teniendo su Universidad”, concluyó la doctora Olavarría Cruz.