7 de diciembre de 2016
En el emblemático Teatro de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras (UPR-RP), y con una gran representación de estudiantes, tunos de diversas generaciones, compañeros de trabajo y familia, el profesor e icónico director de la Tuna de la UPR, Gregorio “Goyo” Acevedo González, le fue otorgado hoy el grado de Doctor Honoris Causa en Artes.
“El Recinto de Río Piedras, reconoce y agradece de la forma elegante en que la academia prestigia a los suyos, a quien por más de cuatro décadas ha laborado para profesionalizar la Tuna, honrando así a la UPR: Goyo, nuestro tuno mayor”, expresó la rectora interina la UPR-RP, María de los Ángeles Castro Arroyo, durante la ceremonia de distinción académica.
La Universidad otorgó este título al músico por su contribución al campo de las artes, pues su compromiso, dedicación y promoción de valores es motivo de honra.
“Traducimos sus logros en un reconocimiento a un compañero universitario humilde, generoso en su trato, de sonrisa amable y totalmente leal a esta institución, a la que expresa cada día su fidelidad, su cariño y su entrega tanto física como espiritual. Gracias Goyo, por darnos ejemplo de lo que es ser un universitario cabal, un modelo para estudiantes y colegas y un perseverante innovador en el adelanto de la misión docente y de servicio en la UPR”, aseveró el vicepresidente de Investigación y Tecnología de la UPR, Dr. José Lasalde Dominicci, en representación de la Presidente Interina de la UPR.
Tras finalizar su discurso, Lasalde Domicci invitó al público a levantarse y exclamar al unísono “¡Goyo, tú eres mío!”, frase que todos los universitarios escuchan durante las presentaciones de Acevedo González.
Durante el otorgamiento del grado y colocación de la esclavina, extunos de la UPR y miembros de la Tuna La Chimba de Chile, la Tuna de la Universidad de Santander en España y de tunas profesionales y universitarias de Puerto Rico, colocaron a los pies de Acevedo González sus capas, honor más grande que una agrupación de este tipo le puede hacer a cualquier persona.
Tras recibir el título, Don Goyo, como se le conoce a Acevedo González, agradeció a su madre, a su esposa e hijos, a los tunos y tunas del recinto riopedrense de la UPR, a los compañeros que lo recomendaron y a “la gente humilde que me ve y me saludan como si fuera uno de ellos”, refiriéndose a los empleados docentes y no docentes del campus universitario.
“Acepto con gran orgullo este gran reconocimiento el cual se me otorga, con el respeto que el mismo conlleva. Hoy, en esta sala, he descubierto que posiblemente soy de las personas que más quieren, más respetan y más admiran en esta Universidad¨, culminó su mensaje Acevedo González.
La Tuna de la UPR, durante la ceremonia, le hizo una ofrenda musical a su director. La agrupación entonó canciones alusivas al homenajeado y realizó los famosos bailes de capa, bandera y pandereta.
Según establece el Reglamento General de la UPR, el grado académico excepcional de Doctorado Honoris Causa se otorga a claustrales o a ciudadanos “por sus contribuciones al desarrollo de las Ciencias o de las Artes, o de cualquier otra manifestación del saber humano, ya en su campo profesional, o mediante actuaciones que promuevan el desarrollo de los valores más preciados de la humanidad”.
Acevedo González, ha dedicado 44 años de su vida a dirigir la icónica agrupación estudiantil y la ha llevado a ser una de las más reconocidas local e internacionalmente. Además, otra de sus contribuciones más significantes ha sido romper con tradiciones europeas y suramericanas, al defender con mucho vigor la participación de las féminas en las tunas. Asimismo, ha logrado que instrumentos autóctonos, como el cuatro y el triple puertorriqueño, sean utilizados en varios continentes.
El músico natural de Ponce, fue el artífice y desarrollador tanto del baile de capa como del de bandera, y fue el responsable de llevar el baile de pandereta a niveles competitivos. En el 2015 ganó el primer premio de pandereta en una competencia que se llevó a cabo en la ciudad de La Serena, Chile. Con este logro, se convirtió en uno de los tunos de mayor edad en ganar un premio de este tipo.